COMPAÑER@S DE TRABAJO

En el trabajo como en muchos lugares, existe gente muy extraña. Personas que no ven la vida de la misma forma que tu, y nunca llegas a entender como son así. Por eso hoy me he decidido a hacer una lista de esos compañeros y compañeras, que hay que echarles de comer aparte. Podemos diferenciarlos por varios tipos:

-El pijo o pija: Son esos compañeros que cobran igual que tu, pero visten como si cobraran 5 veces más. Intentan parecer personas normales y corrientes, pero se les escapan palabras que los delatan. Sobretodo no entienden el significado de la palabra trabajar o lo confunden con escaquear.

-El charlatán: Este no deja de hablar, tiene tema para todo. Lo mismo estas desayunando y le dices

Yo: Oye tío me pasas el aceite

charlatán: ¿aceite? para aceite el que vende mi tío, porque resulta que este fin de semana fui a su masia. ¡tendrías que verla! ¡que masia!

Yo: Es que...lo necesito para el pan...

charlatán: ¿pan? uf pues en mi barrio hay una panadería que no veas lo bueno que esta el pan de allí. Es de una amiga de mi madre que...

Y puede estar así durante horas sin saber cuando cortarle.

-El mudo: Este no habla para nada. Es más si le pagan menos, por no hablar se aguanta. Por mucho que lo intentes es imposible entablar una conversación con el, ya que como mucho te dice un "si", "no" o un jeje.

-Ni fu ni fa: Se le suele llamar así, porque cuando te preguntan si te cae bien solo sabes decir "ni fu ni fa". Es la típica persona con la que no sabes nunca de que hablar. Tu te encuentras con el en un ascensor, y acabas utilizando siempre el recurso del tiempo. Si, lo típico de "Pues se ha puesto el día feo ¿eh?". La frase típica para intentar entablar una conversación, pero que acaba en el mismo momento en el que te responde un rápido "si".

-El fantasma: No se trata de ningún espíritu que se aparece en el trabajo. Sino de la persona que siempre presume de todo, sobretodo de sus conquistas. Por alguna extraña razón siempre busca la forma de contarte las tías que se ligo este ultimo fin de semana:

Yo: Pues anda que no tiene polvo esa estantería.

Fantasma: Para polvo el que eche este fin de semana. Madre mía ¡a 3 me ligue! y eso que iba sin ganas de ligar.

Yo: Joer pues si que ligaste este fin de semana

Fantasma: ¿este? ¡que va tío! ¡todos! no sé que les doy pero cada sábado caen 3 o 4.

Este personaje no da para mas. Le preguntes lo que le preguntes, siempre sale con lo mismo.

-El raro: Nunca sabes que tema hablar con el, y siempre viste de una forma un tanto peculiar. Al igual que otros personajes comentados con anterioridad, este también desvía las conversaciones a temas que no tienen nada que ver:

Yo: Pues estamos teniendo problemas con el transporte. Ojala se solucione.

El raro: La muerte es algo que no tiene solución. Sobretodo cuando no la esperas.

Yo: ¿Que dices de la muerte?

El raro: Nada, que es algo que llegara a nuestras vidas tarde o temprano.

-El pelota: Este es el más odiado en el trabajo. Fastidia los desayunos, ya que cuando te dispones a criticar al jefe se sienta a tu lado y te ves en la obligación de parar. Porque sino se lo contara al jefe, para ganar puntos y seguir siendo su ojito derecho.

-El gracioso: Aunque cree serlo nadie le ha dicho que los chistes tienen un limite. Es de los que se ríen cuando escucha palabras como culo, raja, teta o pene. Su mentalidad no se ha desarrollado lo suficiente y ha quedado estancada en parvularios.

-El cabreado: Siempre esta cabreado y todo le parece mal. Le digas lo que le digas todo le parece una mierda. Se enfada cada día con alguien del trabajo, y solo habla para criticar algo.

-El bajas: Nadie lo conoce, porque desde que entro en la empresa siempre ha estado de baja. Aparece un par de días, y vuelve a coger la baja. Todo el mundo sospecha que un familiar medico esta detrás de tanta "depresión".

-Y por ultimo, El motivado: Lleva un ritmo en el trabajo fuera de lo normal. El resto de compañeros opinan que cada día lleva un par de tripis en el cuerpo, porque sino no lo entienden. Es de los más queridos por los jefes.

Y la verdad que el listado de compañeros especiales es inacabable. Con compañeros así como no quieren que uno coja la baja. Lo raro es que haya gente que quiera ir al trabajo...